Un pájaro vivía en mí.
Una flor viajaba en mi sangre.
Mi corazón era un violín.
Quise o no quise. Pero a veces
me quisieron. También a mí
me alegraban: la primavera,
las manos juntas, lo feliz.
¡Digo que el hombre debe serlo!
(Aquí yace un pájaro.
Una flor.
Un violín).
Juan Gelman
(Ha muerto Juan Gelman. Cuando le reconocieron con el Premio Cervantes, escribí aquí sobre él: Una voz indomable y compañera).
0 comentarios:
Publicar un comentario